"ELYSIUM", O CÓMO HOLLYWOOD ADOCTRINA A LAS MASAS

Como en tantos casos anteriores, el cine de ciencia ficción sigue siendo una de las más eficaces herramientas para habituar a la población a situaciones que parecen imposibles y/o inaceptables, pero que con el tiempo se acaban por materializar. 

En esa línea de acción se sitúa el film "Elysium", aún no estrenado en nuestro país, y que ilustra la división de la humanidad en dos clases radicalmente separadas: la élite privilegiada, viviendo en un entorno idílico, y la masiva clase inferior habitando en un planeta moribundo gobernado por drones robóticos, de un modo similar a cómo lo hacía "Código 46", de Michael Winterbottom.

El trailer de la película, que se estrenará el 9 de agosto en los EE.UU., comienza representando un ejército de drones robóticos haciendo el trabajo de policías. Es el año 2154. Cuando el personaje de Damon expresa ira hacia su tratamiento, se le ofrece una pastilla para calmarlo por un robot burócrata. Cualquier forma de disidencia es tratada como “abuso”. 

Elysium – Paul Joseph Watson – Infowars.com 

Sinopsis: Estamos en el año 2159. Hay dos clases de ciudadanos: los muy ricos que viven en la estación espacial Elysium y el resto, los que viven en un superpoblado y ruinoso planeta Tierra. Una funcionaria del gobierno, Rhodes, (Jodie Foster), no se detiene ante nada para hacer cumplir las leyes anti-inmigración y preservar el estilo de vida de los ciudadanos de Elysium. 

Esto no detiene a la gente de la Tierra, que intenta entrar de cualquier forma a la zona “privilegiada”. Entra en escena Max (Matt Damon) un joven con bastante poca suerte, que es obligado a formar parte de una arriesgada misión que intenta eliminar las barreras entre Elysium y la Tierra. 

Elysium, una nueva película protagonizada por Matt Damon y Jodie Foster, representa lo que muchos futurólogos han predicho desde hace tiempo sobre el destino último de la humanidad – la división de la humanidad en dos nuevos sistemas de clase – una élite transhumanista que centraliza los avances tecnológicos para lograr una utopía y una masiva clase inferior en un planeta moribundo gobernado por drones robóticos.

”La humanidad está dividida entre dos mundos”, dice la leyenda, que explica que la mayor parte de la humanidad se queda en un planeta superpoblado, mientras que la súper elite ha desarrollado un gigantesco planeta espacial lujoso llamado Elysium donde la guerra, la pobreza, el hambre y las enfermedades son inexistentes.

El personaje de Damon se ve obligado a someterse a mejoras cibernéticas antes de poder dirigir una misión a Elysium con el fin de encontrar una cura para el cáncer que ha contraído. La película también está claramente diseñada para ser una burla política a los activistas anti-inmigración.

Sin embargo, muchos de los temas de Elysium se elevan claramente de la obra de los futuristas como Ray Kurzweil, quien en su libro La era de las máquinas espirituales predijo el escáner corporal que se muestra en el trailer eliminando células cancerosas.

El libro de Kurzweil 1999, que preveía con éxito la invención del iPhone, el iPad, Google Glass, iTunes, You Tube y servicios bajo demanda como Netflix, así como el Kindle, predice que para el 2029 la gran mayoría de los seres humanos tendrán en sus cuerpos implantes cibernéticos y los que se niegan o son incapaces de hacerlo formarán parte de una “subclase humana” no dedicándose de manera productiva a la economía.

La tendencia general es que los seres humanos son vistos por la élite como totalmente prescindibles sustituyéndolos por máquinas que desarrollan el trabajo después de 2029, cuando, “Casi no hay trabajo humano en la producción, la agricultura y el transporte”, escribe Kurzweil.

En 2099, el planeta entero está a cargo de los sistemas informáticos de inteligencia artificial que son más inteligentes que toda la raza humana combinada – similar al sistema Skynet de la película Terminator.

Los seres humanos que se resisten a la presión para modificar sus cuerpos al convertirse en parte-cyborg serán aislados de la sociedad.

”Incluso entre aquellos inteligencias humanas sigue utilizando neuronas a base de carbono, hay un uso ubicuo de la tecnología de implante neural, que proporciona un enorme aumento de las capacidades perceptivas y cognitivas humanas. Los seres humanos que no utilizan estos implantes son incapaces de participar de manera significativa en el diálogo que ellos hacen “, escribe Kurzweil.

Una de las voces más clarividentes de la disidencia contra el futuro – a pesar de sus acciones asesinas – fue Theodore Kaczynski, el Unabomber, quien es ampliamente citado por los futuristas como Kurzweil y Bill Joy como sabiamente esbozó los peligros que representan para el público en general por la unidad de la élite de singularidad tecnológica, como se muestra en la película Elysium.

”Debido a las técnicas de mejora de la élite tendrá mayor control sobre las masas, y porque ya no será necesario el trabajo humano a las masas serán superfluas, una carga inútil en el sistema. Si la élite es despiadada puede que simplemente decidan exterminar a la humanidad. Si son humanos pueden usar propaganda u otras técnicas psicológicas o biológicas para reducir la tasa de natalidad hasta que la masa de la humanidad se extinga, dejando al mundo a la élite “, escribió Kaczynski en su manifiesto.