La policía de Italia, le retiró este viernes el pasaporte al exministro, Silvio Berlusconi, luego de que fuera ratificada su sentencia de cuatro años de prisión por el delito de fraude fiscal relacionado con el caso Mediaset.
Los medios de comunicación en Italia, llevaron a cabo el procedimiento luego de que se emitió el decreto para que se ejecute la pena de Berlusconi. La confiscación del pasaporte, se realizó en la jefatura policial donde reside Berlusconi, es decir, en la ciudad de Roma.
Poco antes, el fiscal de Milán, Ferdinando Pomarici, firmó la orden de ejecución de la pena de cárcel contra Berlusconi, quien será beneficiado de la ley de indultos de 2006 y solo cumplirá un año de arresto domiciliario, en vista de que es mayor de 70 años.
No obstante, Il Cavaliere, debe aguardar a que el Tribunal de Apelación de Milán recalcule su inhabilitación, que en primera y segunda instancia fue de cinco años.
Sumado a esto, la sentencia debe ser enviada al Senado, según lo establece la Ley Anticorrupción
El texto de la sentencia también fue enviado al Senado, de acuerdo con lo establecido en la Ley Anticorrupción, razón por la que la Cámara Alta ahora deberá votar la expulsión de legislador condenado.
Esta acción golpearía a la derecha italiana y pondría en peligro la inédita y frágil coalición de gobierno entre la izquierda y el partido de Il Duce.
”Soy consciente del momento delicado, pero creo que hay que pensar primero en Italia. Espero que los intereses del país prevalgan sobre los individuales”, afirmó el primer ministro Enrico Letta sobre la condena.
Entre otras sentencias, Berlusconi ya se había sido condenado por el Tribunal de Milán a siete años de prisión y a inhabilitación perpetua para el ejercicio de un cargo público por el caso Ruby, en el que se le juzgaba por abuso de poder e incitación a la prostitución de menores.
También el exprimer ministro italiano tiene pendiente el juicio en apelación tras la condena a un año de cárcel por violación del secreto de sumario en la instrucción del caso Unipol, al publicar ilegalmente las escuchas telefónicas en el diario Il Giornale, propiedad de su hermano Paolo.
Además, Il Cavaliere enfrenta una imputación en un tribunal de Viterbo por difamación agravada al acusar al exjuez Antonio di Pietro, de representar “lo peor de lo peor” y de haber obtenido su licenciatura gracias a los “servicios secretos”.
Sumado a esto, es juzgado en un tribunal en Nápoles por por sobornar al senador Sergio de Gregorio para hacer caer el Gobierno de Romano Prodi (2006-2008).
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