El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, afirmó este martes que no teme a una reacción internacional en caso de llevar a cabo “los ataques preventivos” contra el enemigo.
El Gobierno israelí aprendió a “no subestimar al enemigo, no ignorar los peligros y no renunciar a ataques preventivos”, dijo Netanyahu durante un discurso ante el Parlamento sionista (Kneset) con motivo del cuarenta aniversario de la guerra del Yom Kipur (1973).
Netanyahu señaló que la decisión de un ataque preventivo es “una de las más duras que un gobierno puede tomar” porque nunca se puede comprobar que sucedería en el caso de no actuar.
Asimismo, advirtió que la paz “se consigue a través de la fuerza, cuando los países hostiles a nuestro alrededor entienden que Israel es muy fuerte y que no va a desaparecer”.
Recalcó que aliviar las sanciones contra Irán antes de que éstas sean realmente efectivas sería “un error histórico” y subrayó que la presión internacional es lo que lleva a los iraníes a “hacer concesiones”.
“Hay circunstancias en las que el pensamiento por una respuesta internacional ante una acción como esa no es igual al alto precio que podríamos vernos forzados a pagar por sufrir un golpe estratégico al que deberemos responder más tarde”, manifestó.
El premier sionista pidió que se “rechacen los intentos de Irán de lograr un acuerdo que mantendría su capacidad de desarrollar armas nucleares”.
Estados Unidos y su aliado Israel argumentan que Irán “esconde” un objetivo militar tras su programa nuclear pacífico y les “preocupa” que Teherán enriquezca uranio a un nivel suficiente para fabricar una bomba atómica.
Pese a estas acusaciones, Israel posee un número no declarado de ojivas nucleares y, a diferencia de Irán, no ha firmado el Tratado de No Proliferación Nuclear ni ha permitido que inspectores de la Agencia de Energía Atómica verifiquen sus instalaciones nucleares.
Estados Unidos por su parte ha desarrollado armas nucleares y ha hecho uso de estás contra las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945, a finales de la Segunda Guerra Mundial, así como se ha negado a firmar algún protocolo de desarme.
En tanto, el Estado persa ha rechazado tales señalamientos y ha aclarado en reiteradas oportunidades que su programa es exclusivamente civil y pacífico.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario